Eterno verano.

viernes, 30 de octubre de 2015

Huancayo, la ciudad menos pensada.

Huancayo llegó a desenfocar mis perspectivas. Y no, no es una apreciación negativa. Es solo que hasta un par de meses antes no estaba entre mis planes visitar la ciudad incontrastable y, debo confesar, que ni el día anterior a viajar me imaginaba que pudiera encontrar un valle y una urbe tan interesantes y llenos de vida y experiencias.

Vamos por partes en este breve recorrido.

1. Laguna de Paca: Este limpio e interesante cuerpo de agua se encuentra un tanto lejos de Huancayo, en las cercanías de Jauja, su tradicional ciudad rival. Se cuentan muchas leyendas al respecto, sobre todo referidas a supuestos avistamientos de seres elementales similares a sirenas, las cuales engañarían a los varones con sus cantos y encantos para sumergirlos en las aguas. Los cuerpos de estos desventurados habrían sido encontrados posteriormente en la Laguna de Nawinpuquio, en Chupaca, con la que existiría conexión subterránea.

En la laguna existe también una pequeña isla llamada "del amor", por sus supuestas cualidades propiciadoras de la fertilidad y de la acción de Cupido.



2. San Jerónimo: Es un pequeño pueblo dedicado en parte a la joyería y la realización de artesanías y adornos de plata, oro y otros metales. Se pueden conseguir a módico precio y un personaje local, el avelino, nos explica cómo es que se realiza el trabajo de fundición y creación de las piezas.



3. Convento de Ocopa: Quizá el lugar más místico y pacífico del Valle del Mantaro. Ubicado en Concepción y fundado en el siglo XVIII, fue el punto de partida de las misiones de evangelización católica hacia la selva peruana. Pasear entre sus paredes o en el pequeño cementerio anexo, dan buenos momentos de tranquilidad y de admiración hacia lo majestuoso.







4. Nevado de Huaytapallana: Una inmensa mole de más de 5.000 metros sobre el nivel del mar en su parte más alta. A diferencia de Pastoruri, aún se puede llegar hasta la nieve, jugar y pasar un buen rato, si es que el soroche no te venció antes. Sin embargo, los meses más propicios para subir son julio y agosto, no siendo muy recomendable hacerlo entre octubre y enero a consecuencia de las impredecibles lluvias, granizo y nieblas que han hecho que más de uno termine perdido y con hipotermia hasta el día siguiente.

Es un lugar de poder: en las aguas de una de sus lagunas también han sido vistos seres elementales en forma de sirenas, los que incluso han sido captados en un reciente video. Es común encontrar restos de rituales antiguos y recientes en todos sus caminos, debido a que desde tiempo inmemorial se le ha venerado como el dios protector de todo el Valle del Mantaro.



5. Río Mantaro: Ya no es el de antes (según me cuentan), pero aún pueden obtenerse algunas buenas tomas en su curso, sobre todo si se está alejado de las ciudades.



6. Catedral de Huancayo: Ubicada en la Plaza de la Constitución, el punto más conocido de la ciudad, cerca a la Calle Real, la más concurrida, que recuerda levemente a algunas de las mejores calles limeñas.

La plaza es especialmente bonita por las noches, cuando se encienden las luces y las fuentes.





7. Cementerio General de Huancayo: Tiene su propia capilla y está abierto durante la mayor parte del día. Sin embargo en esta foto me quedo más con lo hermoso que se ve el cielo huancaíno.



8. Artesanías: Pueden adquirirse a precios razonables en la Casa del Artesano, en plena Plaza de la Constitución, Pero pueden encontrarse precios muy pero muy pero muy atractivos también en la otra Casa Municipal del Artesano, siguiendo en línea recta y cruzando el puente sobre el río, ya en el distrito de El Tambo. Los días domingos, además, se realiza una feria de más de diez cuadras de largo no muy lejos de la Plaza.



9. Parque de la Identidad Wanka: Llegamos en una de las tardes más lluviosas que he experimentado. Es un lugar no excesivamente grande pero que trata de compendiar lo más conocido de la cultura huancaína. Los mates grabados, la música, las artesanías, la vestimenta y los bailes, entre otros.







10. Cerrito de la Libertad: Un interesante mirador desde donde se aprecia toda la inmensidad de La Incontrastable. Tiene una iglesia en su parte superior, bancas, baño público y un pequeño zoológico al que se ingresa por 5 soles.



Bonus Track: Comida y diversión.

- La comida en Huancayo es sumamente económica. Pueden conseguirse menús por 5 soles, los que incluso, incluyen trucha. Aunque, claro, se conoce mejor la gastronomía cuando comes en carretilla. En este caso, el arroz verde con pescado frito nos costó solo 4 soles en las inmediaciones del cementerio (obvien eso, por favor), y venía con su chicha de jora para complementar.



- En las cercanías del mercado principal, encontramos un local denominado "El pescado carajito". Un interesante plato que incluía arroz con mariscos, chicharrón de pescado, ceviche, cancha y su poquito de chilcano, más su refresco de rigor, nos costó solo 4 soles.



- El valle del Mantaro es famoso por su producción láctea. En lugares como la Hacienda Bonanza se vende manjarblanco, helados, yogurt y quesos a precios muy económicos. Por ejemplo, la botella de 1 litro de yogurt de fresa, lúcuma o sauco, solo cuesta 4 soles.



- En cuanto a lugares de esparcimiento, tuve la oportunidad de conocer una discoteca de nombre "Rock and Pop". Pero contrariamente a lo que tal denominación podría sugerir, es una de las discotecas más variadas que he conocido. La música va desde "Dios mío has que me enamore" de Armonía 10, hasta "Suna" de Mar de Copas, pasando por la insufrible "Ginza" de J. Balvin o "Sentimiento original" de Gondwana.



Pero si hay una canción que está sonando fuerte en Huancayo y que escuchamos en el taxi, en el restaurante, en la disco, en el carrito de la emolientera y en cuanto lugar sea imaginable es esta.

Ráfaga ha renacido al pie del Huaytapallana, señores.

domingo, 11 de octubre de 2015

10 canciones para ir por la playa al atardecer.

No importa tanto lo que estas canciones expresen en sus letras como lo que nos hacen evocar con su melodía. Indiscutiblemente no son canciones en las que pensaríamos para alentar una pichanga o para comer un cevichito con su respectiva cerveza (aquí en Perú la música que suele acompañar a la gastronomía nacional es, principalmente, la criolla) pero sí para los momentos en que nos ponemos feeling o vamos, por ejemplo, por alguna carretera solitaria, con el atardecer a un lado y la brisa abofeteándonos el rostro.

O quizá para un momento de contemplación frente al océano, también al atardecer (por la tranquilidad que nos proporciona y las emociones que propicia).

Sin más preámbulo los dejo con diez de estas canciones.

1. Mr. Mister - "Broken wings"


2. The Cars - "Drive"


3. FR David - "Words"



4. Wax - "Right between the eyes"


5. Paul Young - "Everytime you go away"


6. Glenn Medeiros - "Nada cambiará mi amor por tí"



7. Classics IV - "Traces"

Y retrocedimos hasta 1969 para desenterrar casi arqueológicamente, este clásico.



8. Río - "Todo estaba bien"



9. Autocontrol - "Fantasy"


10. Foreigner - "I want to know what love is"


Bonus Track: Cementerio Club - "Una vez más"