Eterno verano.

sábado, 28 de marzo de 2015

Remedios naturales.

Como se habrán dado cuenta, en estos últimos días hemos estado viviendo los primeros gritos del Fenómeno del Niño, así que nuestra temperatura ha estado alrededor de los 30 grados con sensaciones térmicas que llegaban a 35 o 36, lo que ocasionaba que no sólo nosotros nos pudriéramos de calor, sino también la comida.

Y eso pasó, algo de mi comida se pudrió, la comí y terminé un tanto mal.

Pero como yo siempre apelo a lo natural antes que a lo artificial, me dí un salto por las primeras cuadras de la avenida Aviación (cerca a Gamarra) a ver qué encontraba. Lo primero que compré fue, obviamente, mis botellas de tocosh y mi bolsa de hojas de coca, pero, además, fui testigo de otros elementos supuestamente medicinales.

1. Los menjunjes de la selva: Como primera acción, el entendido caballero impone las manos sobre las del potencial cliente para, en base (supuestamente) a su calor corporal, detectar cuál es el mal que lo aqueja. Invariablemente él tiene el remedio, que puede consistir en alguna mezcla de grasa de culebra con eucalipto, baba de caracol, hojas de alguna planta silvestre y restos de alguna infortunada tortuga o caimán. ¿Policía ecológica?

"De una sola te voy a equilibrar los chakras".
2. Tocosh: Un clásico del que ya hablé en un post anterior y que convierte a quien lo consume en una persona que puede dar verdaderas palabras de aliento.



3. Distintas hierbas: Invariablemente alguna servirá para tu afección, sea esta gástrica, renal, respiratoria o cerebral. Y, aunque parezca mentira, el alivio casi siempre llega. La sabiduría de la cultura popular andina es increíble. Un conspiranoico diría: ¿será que los dioses antiguos bajaron y les enseñaron?



4. Pitajaya: Una llamativa fruta amarilla a 12 soles el kilo. Pero vale la pena. De pulpa transparente y similar a la granadilla (repleta de pepitas) es bastante dulce y refrescante. Sin embargo se recomienda no comer demasiada si se tiene problemas de bicicleta, porque puede convertirse en moto.



5. Tuna + Goma de emoliente + Chía y otras hierbas: El combinado perfecto para sanar hasta la peor bicicleta estomacal. Yo lo confirmo. A solo 1.50 la botellita. Y con chía para estar a la moda ¡oiga!


Bonus track: Todos juntos: El suero de tocosh, el preparado para los problemas estomacales, la bolsa de hojas de coca y la pitajaya los invitan a probar la medicina tradicional y confiar en la sabiduría de sus antepasados.

2 comentarios:

  1. La medicina moderna funciona así; si tienes dolor de cabeza, te tomas una pastilla y te pasa el dolor de cabeza pero te jode el estómago; para el estómago te tomas una pastilla y te mejora la gastritis pero te jode la presión, para la presión te tomas un antihipertensivo y te corrige la presión pero te vuelve el dolor de cabeza. Bueno, ese es el negocio de las farmacéuticas.

    En cambio la medicina natural te cura sin joderte nada, es por eso que la gente de la sierra solo se muere de frío o de pena.

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  2. Yo soy super enfermiza -te habrás dado cuenta- y siempre estoy con los mocos o con la panza así que aceKto -con K- que me lleves por esos lados de la salud :D quiero vivir muchos años :D

    ¡Abrazo!

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